27 Abr Poemas que que celebran la belleza del otoño
¡Bienvenidos al encantador mundo del otoño! En este post, nos sumergiremos en la poesía para explorar la magia y la melancolía de esta estación tan evocadora. El otoño, con sus colores cálidos y sus días melancólicos, nos invita a reflexionar sobre el paso del tiempo, el cambio y la belleza efímera de la vida.
Poeta: Belén Ianuzzi
Poema: “Eolo”
Hay olor a moxa en la sala,
se parece al incienso,
pero es más fuerte;
se parece al tabaco,
pero es más suave.
Con mis agujas de acupuntura
espero en una habitación,
junto a una flor, una vela,
un decálogo de medicina china.
Hay olor a moxa,
pero ya no lo siento.
¿Madera, tierra, agua, metal?
Madera.
¿Una estación del año?
Otoño y primavera.
¿Dulce, salado, ácido, amargo, astringente?
Dulce.
¿Viento, humedad, sequedad?
Viento seco.
Autor: Eric Schierloh
Poema: “Pájaros en los árboles”
Yo recuerdo la acacia
durante el otoño,
pelada y húmeda, gris
y cubierta de sombras.
La recuerdo también
entumecida
extática, lejana
en el frío del invierno.
Los tordos visibles,
entonces
casi de inmediato
a simple vista.
La primavera es intrincada.
La vida lo es.
Autor: Diego Ravena
Poema:
A veces, en medio de la noche
creo que despierto pero la sensación
de que aun estoy dormido me atormenta.
El temor no logra, sin embargo calmarme.
Mientras el cuerpo aguarda que todo suceda
pienso “el otoño y su sonido, el relieve
de una estación que se propaga en el aire”,
La voz de mi hermano era en mi niñez
esa vigilia y verdad entonces
las hojas cayendo al otro lado en la ventana.
Autor: Carolina Zamudio
Poema: “Otoño desbandado”
Dulces tardes de castañas tostadas
miro el otoño desde la ventana
veo pasar
-secuencia perdida, hilván de puntadas largas-
el camino hasta aquí.
El azar me trae remotamente, tironea
el cuadro sin acabar detiene el momento:
“no te atrevas a hablarme”.
La noche se apura detrás de los árboles desguarnecidos
y solo sé que esta tarde volverá ocre
(como aquella siesta celeste, charla, pasto,
olor a mandarinas,
Curuzú demorando adolescencia)
a rodar su cadena de dudas
cuando delante esté
¿el mar, el desierto, las pampas?
la paleta desvanezca marfiles
los convierta en recuerdos.
Alguna vieja palabra punzante
este profundo silencio de la casa
todo vendrá.
Se me moja el futuro de unas lágrimas repentinas
que también oscurecen.